Piense y hágase rico III. Conocimientos especializados

N. Hill en referencia al cuarto principio, hace una directa diferenciación del conocimiento, entre el conocimiento general y el conocimiento especializado. Hace una crítica directa a como el conocimiento general, que si bien enriquece de manera personal, no genere dinero, salvo si el conocimiento es organizado y dirigido con ingenio. Aplicado a un fin definido que lleve a la acción. Por lo tanto el conocimiento tiene un poder si este es aplicado y manifestado en un uso directo y práctico.

Como la propia palabra educar indica, proveniente del latín, significa sacar de dentro, extraer y desarrollar..., por lo que la educación reglada, no condición necesaria ni suficiente para el éxito de una persona (pone el ejemplo de Henry Ford). Para N. Hill, "una persona culta es una persona que ha desarrollado las facultades de su mente de tal modo que pueda adquirir cualquier cosa que desee, o su equivalente, sin violar los derechos de los demás".

En definitiva "una persona con educación sabe de dónde obtener el conocimiento cuando lo necesita y cómo lo necesita y cómo organizarlo en planes de acción definidos". La posibilidad de contar con un Equipo Maestro, que le permita acceder al conocimiento necesario y las alternativas posibles es un concepto relacionado con todo esto que después profundizaremos.

El conocimiento necesario para convertir un deseo en un equivalente económico es el de un conocimiento especializado del servicio, mercancía, profesión para obtener el dinero a cambio. El equipo maestro con sus conocimientos y experiencias permitirán llevar a cabo el proyecto o deseo que se materialice en dinero. Por ello, no es necesario que el conocimiento esté en posesión ni completa ni parcial de la persona que tiene el deseo o la idea. Por lo que con la capacidad de dirigir y organizar un equipo maestro de personas cualificadas podremos alcanzar su deseo.

N Hill pone el ejemplo de Carnegie, Ford o Edison, personas sin formación completa pero que supieron encontrar la fuente que alimentará el deseo que mantuvieron.

Eso si, el conocimiento especializado propio de nada innecesario, pero como hemos dicho tampoco imprescindible, debe tener su origen en la concreción del deseo y el objetivo que lo justifique. Y se podrá acceder a desde varias fuentes como la experiencia propia, la compartida de ese grupo maestro, escuelas y cursos especiales y toda la información que hoy día es accesible por medios digitales. En cualquier caso estos deberá estar organizados, utilizados con finalidad concreta y aplicación loable.

"Las personas triunfadoras en cualquier vocación nunca dejan de adquirir conocimientos especializados relacionados relacionados con su principal objetivo, negocio o profesión. Aquellas que no tienen éxito normalmente cometen el error de creer que el período de adquisición de conocimientos termina cuando concluye la escuela". La escolarización debería ser una iniciación, una apertura de mente y del camino al aprendizaje, de generar el cómo y la inquietud por saber.

La cualificación, que siempre es necesaria, no es indiscutiblemente la condición principal para triunfar. Si bien la formación especializada siempre ha sido una capacidad valorada, siendo esta formación cambiante en el tiempo, hay rasgos y valores de personalidad que sobreponderan en la capacidad de una persona y que no tienen obsolescencia: carácter, personalidad, inteligencia, y actitud positiva. La condición de un estudiante académico 10 concederá conocimiento válido y su capacidad de transmisión aún más. Pero el foco y la concreción práctica será la diferencia entre personas con éxito y sin el.

De este modo, el aprendizaje, entendido como formación continua, concreta y práctica aplicada es fundamental y prevalente.

El autor aboga por que la formación universitaria empuje a la concreción de los objetivos personales de los estudiantes, que escoja un rumbo cierto o lo concreto posible hacia la especialización. Un camino que no termina en la formación universitaria, que es necesaria de actualización y reciclaje. Hoy, esto es más rápido e importante que nunca. Es el paradigma de esta edad en el siglo XXI.

La formación continua, necesita de una autodisciplina que en muchos casos solo el coste económico que supone, además del tiempo, es el impulsor de ese esfuerzo. Las cosas que se consiguen sin esfuerzo, ni siquiera económico, son valoradas del modo que debieran y son desprestigiadas. La formación pública y gratuita debiera ser más y mejor aprovechada y semilla de la autodisciplina necesaria para toda la vida. Pero por desgracia esa gratuidad que debiera ser oportunidad se convierte en debilidad. Son promotoras de la falta de ambición.

El conocimiento especializado se convierte en una necesidad en momentos de crisis y de cambios como las revoluciones que hoy en día estamos viviendo. La digitalización tan nombrada y todo lo que en torno sateliza es una oportunidad para la persona consciente de la formación continua, la especialización y la autodisciplina. Debemos hacer un inventario de capacidades propias y proveernos de las habilidades y conocimientos necesarios para atender el mercado.

"La persona que deja de estudiar simplemente porque ha terminado la escuela está inevitablemente destinada para siempre a la mediocridad, sea cual sea su vocación. El camino del éxito es el camino de la continua búsqueda de conocimiento".

Hoy en día, la información reglada y obligatoria, que en nuestro país además de denostada es recortada y abusa del derecho y la facilidad de certificación, se queda atrás en un mundo en el que paradigma no es el cambio constante, sino la velocidad de este. Esperar nunca fue la mejor opción, ni del cavernícola esperando que el león se fuera a por otro. Pero hoy es imperdonable no pasar a la acción.

Las ideas y el pensamiento, unido a la aplicación con fe de la acción, nos ayudará a salvar las dificultades con el continuo proceso formativo de las materias especializadas que nos desenvuelvan mejor y nos gusten o motiven.

Por otro lado, N. Hill saca a comentario ideas y conceptos varias relacionados con la potencialidad de la carrera personal y profesional. Uno de ellos es el de la oportunidad. En este sentido entiende que no es sólo cuestión de crearla, estar preparado , sino sobre todo ser capaz de reconocerla y asirla fuerte .y para ello es necesario una capacidad de observación y también recalca de estar en niveles medios-elevados de los negocios o las instituciones, donde las perspectivas son más favorables para ello, y se esté lo más alejado posible de rutinas o hábitos desalentadores.

No confundir las derrotas con los fracasos también es importante. Una idea tan estoica, como el hecho de que cualquier resultado positivo te enseña, pero uno negativo te hace virtuoso, ambas cualidades para toda la vida para ser "un-mejor-persona". Y este además es un caso más de visibilidad de la oportunidad. Esta visibilidad es bidireccional. Has de ver la oportunidad en el momento que esta te ve o te descubre. Y esta puede y suele estar oculta en muchas de las adversidades que nos llegan en la vida. Eludirlas puede ser una especie de cobardía propia de un anti-héroe. Aceptarla tendrá siempre un regalo; un premio o enseñanza, una oportunidad y la posibilidad de desarrollar algo que te descubre.

Otro aspecto fundamental en todo este principio del conocimiento es el hábito, fundamental con independencia del resultado : positivo o negativo. Te hace entender dónde está el valor: el camino. El resultado será un premio o una referencia de aprendizaje, pero lo importante del hábito es permitir continuar el camino. Mejora, experiencia, virtud,... todo ello está en el hábito, siempre orientado a un objetivo positivo.

Y por último y no menos importante, N. Hill habla del cambio de paradigma profesional que se dio en la época que vivió, coincidente con la Gran Depresión de 1929 y años siguientes. El salto de los servicios profesionales y el valor que pueden crear y hacer valer. Sin extenderme en aquel entonces, en nuestra nueva era digital, con un nueva revolución, con una crisis financiera reciente - y no sabemos si alejada del todo- hoy se pone más que nunca especialmente relevante como medio de negocio, de vida y de aportar algo a los demás. En este mundo los servicios no tiene precio fijo, y el intercambio es más rápido y por tanto generador de riqueza y valor. Aquí hay también y sobre todo, potencialidad de crecimiento de la economía. Y también la tuya. Y detrás de todo esto está un conocimiento especializado, más fácil de adquirir que una idea. La idea sigue siendo lo principal, el conocimiento especializado es una obligación a su alcance.